capitulo 3

21 de marzo, hoy cumplo 6 añitos y estoy sola, mi papá y mi mamá han muerto y me siento más sola que nunca, ahora me quedo con mi tia, pero ella no me gusta, siempre me vengo aquí cuando estoy triste, este cerezo es mi único amigo

-Jo, no es justo- empecé a llorar

-¿Qué por que lloras?

-Porque estoy sola, mi papá y mi mamá se han ido al cielo y no tengo amigos

-No estás sola, a partir de ahora yo siempre estaré contigo, soy Andy, ¿Cómo te llamas?

-Me llamo Sheila, pero todo el mundo me dice Yami

- Pues Yami, sécate las lagrimas y mira al cielo, así por muy lejos que estemos el uno del otro siempre estaremos unidos- me dijo cogiéndome la mano y sonriéndome

- Si- sus palabras hicieron que yo dejara de llorar y me sacaron una sonrisa. Desde entonces estoy enamorada de el.

Un año después

21 de marzo, hoy es mi cumple, voy a hacer 7 años y Andy y yo hemos quedado en el cerezo, quiere decirme algo muy importante.

-Andy!!!- grité mientras saludaba y corría hacia Andy

-Yami- dijo desanimado

-¿Qué te pasa Andy?

-Mi padre quiere que nos vayamos, desde que mi madre se fue le cabrea todo lo que ve y le recuerda a ella

-No… ¡NO! Andy me prometiste que siempre estarías conmigo!, no puedes irte- dije gritando con lagrimas en mis ojos

-Lo siento Yami, pero no me queda otra, no quiero irme pero mi padre me obliga

-No es justo… me quedaré sola otra vez…

-Yami, te prometo que volveré, así que sécate las lagrimas y mira al cielo, así por muy lejos que estemos el uno del otro siempre estaremos unidos- me dijo cogiéndome la mano y sonriéndome, entonces me dio un pequeño beso en los labios

-Si, prométeme que nunca me olvidaras

-Te lo prometo- dijo sonriendo

Nos dimos un abrazo y se fue corriendo mientras yo lo miraba con una sonrisa triste.

Entonces desperté….

Todo pasó hace 9 años, me prometió que volvería, pero no lo hizo y seguramente ya se habrá olvidado de mi. Pero eso ya no importa ahora me he vuelto a enamorar, aun que ella no me vea de esa forma. Y hablando de amor no correspondido, el mío debe estar apunto de salir.

Me he vestido corriendo y he desayunado, al salir ella acababa de llegar a mi puerta.

-Yami, hoy estas muy guapa- me dijo sonriendo

-g-gracias, tu también esta s muy guapa- dije entrecortada.

-¿vamos?

-Si.

No se queme pasa cuando estoy con ella, me sonrojo con un simple roce de manos o con un beso en la mejilla, no me salen las palabras cando intento hablar con ella, me siento ridícula…

Creo que es la primera vez que llego a tiempo en clase, incluso el profesor me lo ha dicho. En la hora del recreo me fui a la azotea, desde allí volví a ver a Lisa rodeada por esas tres lagartas. ¿Le estarán molestando? No soporto verla con esas tres, puede que su estupidez sea contagiosa y no quiero que Lisa se vuelva como ellas.

Al llegar a clase:

-¡Señorita, llega 5 minutos tarde!¿cual era su nombre?- me dijo el mismo profesor que me regaño ayer

-Mi nombre es yami,¡¡ así que no me digas señorita y no me grites, ya te lo dije ayer!!-respondí enfadada

-Señorita, no le consiento que me grite, ni le permitiré usar motes en esta clase, así que dígame su nombre

-Ya te lo he dicho y si quieres que te llame de usted primero llámame como yo quiera- dije aún mas enfadada

-pero ¿Usted quien se ha creído que es?- preguntó gritándome

-Soy la que te va a partir la cara como no dejes de gritarme- respondí acercándome a su mesa de forma amenazante

-¡¡No le consiento que me amenace señorita!!

-¡¡Y yo no le permito que me grite ni me diga señorita!!- contesté mientras le cogía del cuello de la camisa. La clase se quedo en completo silencio al igual que el profesor que se le veía con cara de miedo y casi temblando, entonces abrieron la puerta

-¡Yami, suéltalo por favor!-dijo la profesora que entró en la clase para detenerme, pero ¿Quién demonios lo ha llamado?

-Escuché mucho ruido dentro y me imagine que Yami estaría haciendo otra de las suyas, así que llame a un profesor de guardia- dijo Debrah con cara de niña buena detrás de la profesora de guardia

-Ven conmigo por favor Yami- dijo serenamente la profesora, solté al profesor y me fui con la profesora al despacho de la directora.

-Mala pécora- le susurré a Debrah mientras salía con la profesora y ella sonreía victoriosa.

En el despacho de la directora me senté frente a ella para aclarar lo que había pasado.

-Yami, entiendo que no te caigan bien todos los profesores, pero esa no es razón para agredir a ninguno- me dijo serenamente la directora

-¿Agredir? Yo no le he hecho nada, el me empezó a molestar y a gritarme hasta que me cabreó del todo, si le hubiera agredido no seguiría vivo

-Debes aprender a controlarte, Yami, llegas tarde a las clases, no traes los deberes hechos, respondes mal a los profesores, lo siento, pero esta vez voy a tener que expulsarte

-Está bien- respondí

Al terminar las clases esperé a Lisa en la salida

-Yami, ¿Qué ha pasado? Me he enterado de que te han expulsado

-Un profesor se paso conmigo e intente pegarle

-¿Cómo se te ocurre pegarle ha un profesor?

-No le pegué, me interrumpieron cuando iba ha hacerlo

-jajaja, Yami, eres increíble, vamos-me cogió la mano y tiró de mi para que empezáramos ha caminar

-Oye Lisa, ¿Debrah y las otras te molestan?

-No ¿por qué?

-Ayer y hay te he visto en el recreo con ellas y ellas nunca traman nada bueno

-N-no te preocupes,  t-todo va bien

-¿Seguro?

-S-si

A pesar de que me halla dicho que todo está bien no me lo termino de creer.

Cuando llegamos a casa Lisa me paró

-¿Tus padres te castigaran por la expulsión?

-Probablemente

-¿hasta cuando estarás expulsada?

-Hasta el Lunes

-pues entonces nos vemos el Lunes, te echaré de menos- dijo mientras me abrazaba, yo correspondí el abrazo sintiendo como mis mejillas se enrojecían

-Y-yo también

- Adiós- me dio un beso en la mejilla y se despidió con una gran sonrisa




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